Llegamos
a un lugar bonito, al cual no había ido antes. Se
llamaba la ''Bella Italia'' y al parecer estaba de moda. Había mucha gente, y nos fue difícil distinguir una mesa vacía. Había justo uno para dos, y Jasmine me hizo señas de que la siguiera. Camine hasta la mesa y con mucha caballerosidad me le corrí el asiento para que se pudiera sentar. Le sonreí. Ella se sentó y pidió un par de copas.
Me sentía tan contento de poder conversar y hacer algo distinto.
Bebí de mi vaso y me reí ante una broma tonta de Jasmine. Mis ojos estudiaron un momento el lugar y hubo un segundo en que de verdad creí que me había vuelto loco.
Unos ojos cafés me miraban. Unos que yo conocia muy bien. M*erda.....
No podía ser. Esto no me podía pasar a mí. De todos los rincones de toda la maldita cuidad… teníamos que venir al mismo sitio. Esto parecía una broma macabra.
Mi corazón me dio un vuelco en el pecho y sentí que me temblaba la mano. La mire de nuevo y mis ojos vieron solo una cosa. La mano de ______(tn)… tocando la de él.
Si no hubiese sido porque Jasmine estaba a mi lado, me hubiese dado algo. Estaba segura de que mi pulso se podía escuchar por sobre el barullo del local.
Y mi mente se puso en piloto automático. Lo único que deseaba era no llorar ahí, por favor, no llorar… he hice lo mas estúpido que podría haber hecho. No sé porque fue. Fue una mezcla de celos y desesperación. Y sin peguntar nada, estampe mis labios en los de Jasmine…
Cerré los ojos con furia y trate de besarla con toda mi alma, Tratando de borrar la visión de aquellos ojos cafés que tanto amaba. Pero mis labios apenas si se movieron. Fue un patético intento de auto preservación. Para cuando abrí los ojos de nuevo, los ojos cafés ya no estaban.
Me separe de Jasmine, quien me miraba casi aterrada.
-Jasmine: ¡Qué diablos significo eso! – preguntó con los ojos como plato.
-Tom: Lo - lo s-siento – balbucee a punto de llorar.
Jasmine me miro sin comprender. Yo temblaba al punto de casi desmayarme. Al final creo que comprendió.
-Jasmine: _______(tn) verdad ?– me dijo casi en un susurro.
(Yo solo atine a asentir, sin poder emitir una sola palabra).
Si- murmuró ella- creí que era _______(tn) cuando entramos… pero supuse que estaba en California.
Yo no dije nada, pero mi estado era lamentable. Jasmine no necesito más explicaciones para sacarme casi arrastrando de allí. Me sentía morir.
Me quede en la entrada mientras Jasmine corría por su coche. Y la vi de nuevo. Estaban esperando el jeep de Alice y me sentí un imbécil de no haber reconocido a nadie más en la mesa. Ni a mi propia hermana. Algo me hizo clic en el interior. No podía dejar que se fuera. No esta vez.
Todavía en piloto automático, camine hasta ______(tn), con decisión.
-Tom: Princesa....– dije con una voz extrañamente resuelta, que no parecía la mía.
Vi que ______(tn) se tenso un momento al escuchar mi voz. Se dio la vuelta lentamente y quede sin oxigeno. Se veía condenadamente bien. Mi pequeña, no podía verse mejor que antes.
Pero allí estaba. Era como una visión. Y esos ojos cafés…
Vestía un hermoso vestido floreado con tonos azules, sandalias blancas sin taco y su cabello estaba ondulado y dejado al aire, como cuando yo la lleve al salón y pedí que se lo cortaran. Su piel seguía siendo blanca, pero tenía un leve tono bronceado que le sentaba estupendo. Sus labios rojos se entreabrieron levemente y por un momento sus ojos me miraron con algo de desesperación. Pero al segundo vi como se volvieron duros y su ceño se frunció.
-Tu: No me llamo princesa Tom...– me dijo fríamente – mi nombre es _______(tn).
Temblé ante mi nombre salido de sus labios. Trague con fuerza y lance lo primero que se me vino a la mente.
-Tom: ¿Cómo has estado ______(tn)? – pregunte, haciendo énfasis en su nombre.
Vi como el… chico que estaba a su lado, caminaba hacia el Jeep y nos dejaba solos. Al menos el maldito era levemente razonable.
-Tu: No tan bien como tu – me dijo mirándome de pies a cabeza, con un dejo de burla.
-Tom: Tú te ves bien… le dije anhelante, tratando de no temblar – muy bien-
-Tu: Gracias – dijo, llevándose una mano al cabello, nerviosa.
Su gesto me desarmo por completo. Una cosa estaba clara. Deseaba a esta chica como nunca desee a nadie. Mis rodillas casi se doblan cuando sentí su suave aroma golpeando mi nariz.
-Tom: No te gustaría… dar una vuelta – le dije, sin saber aun que demonios decía.
-Tu: ¿¡Que! – pregunto algo consternada, pero de inmediato se compuso – ¿Por qué Tom… tu mascota de hoy no se encuentra disponible?
La vi mirarme con desprecio en su mirada. Su manos estaban empuñadas y su labios apretados. Me dolieron sus palabras. Pero tenía razón de pensar mal de mí. Yo no había hecho más que darle razones para que pensara así… Para variar, la había cagado.
-Tom: Ella es solo mi amiga- balbucee, tratando de explicarme.
-Tu: ¿Así... como lo era yo? – pegunto alzando una ceja.
-Tom: No- murmure, nervioso – _______(tn) Y-yo…
Y me acerque a _______(tn), estirando mi mano. Quería tocarla. Sentirla. Casi la pude tocar. Pero ella se alejo de mí. Ese gesto me dolió.
-Tu: Estoy ocupada Tom, dime qué diablos quieres – me dijo cortante.
La mire algo asustado. La _______(tn) que yo recordaba no era tan fría e indiferente…
-Tom: Quisiera que habláramos… - dije, sacando fuerzas de flaqueza.................
llamaba la ''Bella Italia'' y al parecer estaba de moda. Había mucha gente, y nos fue difícil distinguir una mesa vacía. Había justo uno para dos, y Jasmine me hizo señas de que la siguiera. Camine hasta la mesa y con mucha caballerosidad me le corrí el asiento para que se pudiera sentar. Le sonreí. Ella se sentó y pidió un par de copas.
Me sentía tan contento de poder conversar y hacer algo distinto.
Bebí de mi vaso y me reí ante una broma tonta de Jasmine. Mis ojos estudiaron un momento el lugar y hubo un segundo en que de verdad creí que me había vuelto loco.
Unos ojos cafés me miraban. Unos que yo conocia muy bien. M*erda.....
No podía ser. Esto no me podía pasar a mí. De todos los rincones de toda la maldita cuidad… teníamos que venir al mismo sitio. Esto parecía una broma macabra.
Mi corazón me dio un vuelco en el pecho y sentí que me temblaba la mano. La mire de nuevo y mis ojos vieron solo una cosa. La mano de ______(tn)… tocando la de él.
Si no hubiese sido porque Jasmine estaba a mi lado, me hubiese dado algo. Estaba segura de que mi pulso se podía escuchar por sobre el barullo del local.
Y mi mente se puso en piloto automático. Lo único que deseaba era no llorar ahí, por favor, no llorar… he hice lo mas estúpido que podría haber hecho. No sé porque fue. Fue una mezcla de celos y desesperación. Y sin peguntar nada, estampe mis labios en los de Jasmine…
Cerré los ojos con furia y trate de besarla con toda mi alma, Tratando de borrar la visión de aquellos ojos cafés que tanto amaba. Pero mis labios apenas si se movieron. Fue un patético intento de auto preservación. Para cuando abrí los ojos de nuevo, los ojos cafés ya no estaban.
Me separe de Jasmine, quien me miraba casi aterrada.
-Jasmine: ¡Qué diablos significo eso! – preguntó con los ojos como plato.
-Tom: Lo - lo s-siento – balbucee a punto de llorar.
Jasmine me miro sin comprender. Yo temblaba al punto de casi desmayarme. Al final creo que comprendió.
-Jasmine: _______(tn) verdad ?– me dijo casi en un susurro.
(Yo solo atine a asentir, sin poder emitir una sola palabra).
Si- murmuró ella- creí que era _______(tn) cuando entramos… pero supuse que estaba en California.
Yo no dije nada, pero mi estado era lamentable. Jasmine no necesito más explicaciones para sacarme casi arrastrando de allí. Me sentía morir.
Me quede en la entrada mientras Jasmine corría por su coche. Y la vi de nuevo. Estaban esperando el jeep de Alice y me sentí un imbécil de no haber reconocido a nadie más en la mesa. Ni a mi propia hermana. Algo me hizo clic en el interior. No podía dejar que se fuera. No esta vez.
Todavía en piloto automático, camine hasta ______(tn), con decisión.
-Tom: Princesa....– dije con una voz extrañamente resuelta, que no parecía la mía.
Vi que ______(tn) se tenso un momento al escuchar mi voz. Se dio la vuelta lentamente y quede sin oxigeno. Se veía condenadamente bien. Mi pequeña, no podía verse mejor que antes.
Pero allí estaba. Era como una visión. Y esos ojos cafés…
Vestía un hermoso vestido floreado con tonos azules, sandalias blancas sin taco y su cabello estaba ondulado y dejado al aire, como cuando yo la lleve al salón y pedí que se lo cortaran. Su piel seguía siendo blanca, pero tenía un leve tono bronceado que le sentaba estupendo. Sus labios rojos se entreabrieron levemente y por un momento sus ojos me miraron con algo de desesperación. Pero al segundo vi como se volvieron duros y su ceño se frunció.
-Tu: No me llamo princesa Tom...– me dijo fríamente – mi nombre es _______(tn).
Temblé ante mi nombre salido de sus labios. Trague con fuerza y lance lo primero que se me vino a la mente.
-Tom: ¿Cómo has estado ______(tn)? – pregunte, haciendo énfasis en su nombre.
Vi como el… chico que estaba a su lado, caminaba hacia el Jeep y nos dejaba solos. Al menos el maldito era levemente razonable.
-Tu: No tan bien como tu – me dijo mirándome de pies a cabeza, con un dejo de burla.
-Tom: Tú te ves bien… le dije anhelante, tratando de no temblar – muy bien-
-Tu: Gracias – dijo, llevándose una mano al cabello, nerviosa.
Su gesto me desarmo por completo. Una cosa estaba clara. Deseaba a esta chica como nunca desee a nadie. Mis rodillas casi se doblan cuando sentí su suave aroma golpeando mi nariz.
-Tom: No te gustaría… dar una vuelta – le dije, sin saber aun que demonios decía.
-Tu: ¿¡Que! – pregunto algo consternada, pero de inmediato se compuso – ¿Por qué Tom… tu mascota de hoy no se encuentra disponible?
La vi mirarme con desprecio en su mirada. Su manos estaban empuñadas y su labios apretados. Me dolieron sus palabras. Pero tenía razón de pensar mal de mí. Yo no había hecho más que darle razones para que pensara así… Para variar, la había cagado.
-Tom: Ella es solo mi amiga- balbucee, tratando de explicarme.
-Tu: ¿Así... como lo era yo? – pegunto alzando una ceja.
-Tom: No- murmure, nervioso – _______(tn) Y-yo…
Y me acerque a _______(tn), estirando mi mano. Quería tocarla. Sentirla. Casi la pude tocar. Pero ella se alejo de mí. Ese gesto me dolió.
-Tu: Estoy ocupada Tom, dime qué diablos quieres – me dijo cortante.
La mire algo asustado. La _______(tn) que yo recordaba no era tan fría e indiferente…
-Tom: Quisiera que habláramos… - dije, sacando fuerzas de flaqueza.................
Hay no Tom tenias q besarla >.<
ResponderEliminarahora sufriras te toca volver a conquistalarlaa... Siguelaaa me encanta mucho la fic.. Bye :D
Pobre Tom: sufre, sufre! >:D Jaja. Okaay, no.
ResponderEliminarPor favor, no la dejes ahí! D: Moriré de la intriga u.u
Cuídate. Mil bendiciones. ¡Adiós! :-D