Capitulo 13 :D

Lo último que quería era toparme con Tom o sus amigos, pero con mi suerte, en cuanto entre me tope con ellos.
Trate de pasar desapercibida, pero no lo logre. Un mar de murmullos me distrajo un poco, mientras unos chicos me miraban como si hubiesen visto a algún fantasma. No se creían que era yo, al parecer.

Mis ojos se toparon con los de Tom, justo antes de pasar al salón de clases. Hubiese jurado ver un brillo de felicidad, pero se desvaneció al momento. Quizás eran solo ideas mías, al final.
Me tuve que poner al día en varias clases que habían avanzado, pero no fue mayor problema. Las matemáticas no fueron problema tampoco y di dos de los test que debía para completar mis notas. En solo un día quede al corriente con todo lo que tenia retrasado, y eso me enorgulleció de mi misma. También recibí dos o tres recaditos con declaraciones de amor. No me lo creía. Lo que hacía un corte de cabello.
Casi al final del día, un chico de ojos azules me entregó una nota, y luego se fue, mientras me sonreía. Extrañada vi la nota y me temblaron las piernas.
 Era de Tom
"Necesitamos hablar, espérame en la cafetería a la salida de clases. Tom.''
No estaba segura de asistir. Lo más probable es que me quisiera mandar al diablo en forma definitiva y no estaba preparada para eso. Los nervios me apretaron el estomago. No quería que terminaran las clases.
La hora de la salida llego demasiado pronto para mi gusto y con resignación, me dirigí a la cafetería. Estaba casi vacía. No vi a Tom, y pensé que quizás se había arrepentido. Respire algo más tranquila cuando un par de manos me taparon los ojos
El aroma de su piel era inconfundible. Aun antes de que hablara, yo ya sabía que era él.

-Tu: Tom... – musite, tomando una de sus manos.
-Tom: ¿Sabías que era yo? – me dijo algo extrañado.
-Tu: Si – le dije simplemente, sonriéndole levemente.
-TomVen – me dijo tomándome de una mano.

No sabía a dónde íbamos, pero me deje guiar. No me importaba si me llevaba a un matadero siempre y que fuera de su mano. Estaba peor de lo que yo misma creía. Mis ojos veían su cuerpo, su cabello y esos labios que me hacían estremecer con tan solo querer besar. Los tres días de sufrimiento desaparecieron de golpe, como si no hubiesen existido.

De pronto me di cuenta de que estábamos en una de las alas alejadas del instituto, donde estaban las salas antiguas de laboratorios. Ya casi nadie venia por estos lados, y me extraño. Iba a preguntar algo, cuando de pronto, Tom me estampo en una pared y me beso.
Abrí los ojos con asombro, pero mi cuerpo reacciono en seguida, y lo tomé del cuello, acercándolo más a mí.

Tom lanzo un pequeño gemido y abrió su boca, introduciendo su suave lengua dentro de la mía. El calor me embargo por completo, y mis manos presionaron con fuerza, mientras el deseo me llenaba el cuerpo. Tom enredo sus manos en mi cintura y me beso con más furia. Le devolví el beso, ansiosa. Puso algo de distancia entre nosotros, sin separar nuestras bocas. Lo vi abrir un poco su camisa para que introdujera mis manos y así sentir las palpitaciones de su corazón, que con cada roce parecía explotar.


Luego casi sin darme cuenta, posó sus manos en el cierre de mi short y lentamente comenzó a bajarlo. Gemí en respuesta. Con un cuidado y lentitud que me volvian loca, introdujo su mano en el interior de mi ropa interior acariciando primero el clítoris con movimientos circulares, creí desfallecer ahí mismo con todo el placer que me hacia sentir, no pude evitar el impulso de morder mi labio, a Tom pareció gustarle ya que aceleró los movimientos para dar paso a uno de sus dedos. Lo metio lento como si ya supiera que yo nunca habia estado nunca con nadie, lo cual agradecí totalmente, pero no pude contener un gemido de dolor que ahogue en la boca de Tom.

 Él se dio cuenta y me dijo que me relajara, que solo al principio dolería y que luego solo le pediría más y más. Estuvo asi unos minutos hasta que introdujo un segundo dedo y pude sentir como mis paredes se contraían para no dejar escapar esos movimientos y ese placer que me hacían sentir casi tocar el cielo, hasta que ya no pude más y me escurrí en sus dedos dando paso a un poderoso orgasmo que hizo estremecer a Tom y él tambien gemir en mi oído. Agitado retiró su mano de mi interior totalmente húmedo e hizo que me dejo totalmente impresionada. Miró sus dedos y se los introdujo a la boca mirandome con su ojos envueltos en infinito deseo.........